En una cena reciente con un grupito de madres sale un
tema candente a colación. “Mi madre dice que hay que ser algo sumisa para que
funcione una relación” –dice una en plena charla sobre tíos. “¿Estás de coña?
Ceder terreno no puede traer nada bueno” – contesta otra. “Los hombres son como
son, algo hay que aguantar si no te quieres divorciar” –replica una tercera.
“Pues yo no le paso ni una. Ese rollo entregado de la vieja escuela conmigo no
cuela” –añade otra más. La primera nos cuenta entonces que ella siempre intenta
conciliar, que le gusta cocinar, encargarse de los críos, que su marido en
general se hace el desentendido pero que es algo que ella tiene asumido. Otra
en cambio afirma que tiene las tareas repartidas, convenidas, en un “tú a tú”
diario, un proyecto igualitario. Entonces llega la revelación de una que
todavía no había dado su opinión: “A mí me compensa tenerlo contento, me gusta
ese punto de estar receptiva, dispuesta, yo hasta lo espero desnuda cuando se
va de fiesta”. En la mesa se propaga el alboroto. “No te creo, cuando sale yo
siempre me mosqueo”, “me daría pereza, además, me parece una bajeza”,
“¿aguantar hasta su vuelta y complacerlo cuando ha estado de copas mirando a
otras?” –bombardea el resto sorprendidas por lo expuesto. Ella sonríe y habla:
“es mi fantasía, me imagino aguardando a un marinero tras semanas de travesía
que irrumpe como un león a mi habitación y se lanza voraz sobre mí, que me he
untado la piel con cremas, delicada, lanzada. Él entonces me posee y yo me
excito pensando en mi esencia femenina, como una concubina”- concluye. El resto
la miramos en silencio con curiosidad, pensando si lo que dice será verdad.
Ella se mira las uñas perfectamente pintadas mientras emite su conclusión:
“llega un momento en toda relación en el que ser un poco putilla es la mejor
opción”.
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Me acabo de tragar de golpe todas las entradas que tienes colgadas...¡eres muy buena! me gusta mucho como escribes y los temas que escoges...me siento cerca porque de lo que hablas también me pasa a mí...olé....y además en Valencia....lugares comunes....
ResponderEliminarParece que ahora se demanda en cada varón ser un Grey, no sé si es tan falso la sombra del tópico que los hombres prefieren a una putilla.
ResponderEliminarQue perdure la pasión.