viernes, 20 de septiembre de 2013

PRECISIÓN SEXUAL



Descubro no hace mucho que al hablar de infidelidad para algunos, el tema del qué  y el cómo es fundamental a la hora de valorar los daños, es decir, que un morreo sería menos que un magreo pero más que una caricia. La revelación llega de boca de Cristina, la hermana de una vecina con la que a principios de semana coincido tomando un café. La dama, atractiva, vive emparejada con un chico que trabaja de comercial y del que dice estar enamorada. El tema es que hace cosa de un mes, tras una salidita, y aprovechando un viaje de su chico, termina en casa del amigo de un amigo que se ofrece a darle un masaje. Tras ponerse cómoda y liberarse de algo de ropa se funden en un tórrido beso, durante el cual él inspecciona sus pechos y ella desliza su mano por su vientre en sentido descendente. Ya en la habitación siguen con ese abrazo sensual que consuman con una sesión recíproca de sexo oral. “Al no haber penetración yo no lo considero infidelidad” –suelta Cristina con seguridad mientras su hermana asiente comprensiva. “¿Estáis de coña? –pregunto sorprendida. “Es verdad. Ya me ocurrió algo parecido en una ocasión. Él me preguntó ¿os habéis acostado? Yo lo negué, pues no hubo consumación” –sentencia. Alucinada miro a estas hermanas que valoran la práctica sexual no como un encuentro carnal, sino como un estudio forense con fases acotadas que, pese a revestir la misma indecencia, restan de importancia al considerarlas una práctica menor.  La equivalencia quedaría resumida en unos cuantos eufemismos como “tomar una copa” en vez de besarse en la boca, “es como si fuera mi hermano”, en vez de “me ha metido mano” o “vimos una peli en el sillón”, en lugar de “le hice una felación”. Por ello, si alguno se siente engañado o alguna cornuda, aconsejo ser preciso y literal para eliminar cualquier atisbo de duda.

1 comentario:

  1. Me has recordado a un compañero de trabajo, que sostenía que una mamada no eran cuernos... Pero supongo que la otra parte también tiene algo de culpa, ya que si no le da importancia a que su chica se la chupe a otro, me parece normal que esta lo haga. En ese caso, habiendo consentimiento, si que no hay infidelidad, ya que la infidelidad, parte del desconocimiento de los hechos por parte de la otra parte. ¿No crees?
    Saludos.

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